Juan Manuel Santomé Calleja nació el 21 de marzo de 1969, primer día de la primavera, y es un artista polifacético que dibuja, pinta, ilustra, diseña, esculpe, fotografía y también escribe. Dice que le gusta dibujar la realidad para que no desaparezca, que quiere narrarla de mil maneras para que exista. También dice que el tiempo deja de existir cuando tiene un lápiz entre las manos. Por eso, siempre lleva uno encima y un sacapuntas de metal, de los antiguos, en el bolsillo del pantalón y siembra bocetos en cada papel que se le pone por delante.
Aprobó el ingreso a la carrera de Bellas Artes, después de un año intenso de preparación, pero luego estudió Económicas. Desde entonces lleva una doble vida en equilibrio entre la realidad y el deseo, cavando túneles de ida y vuelta. Trabaja por la justicia y contra la pobreza en el mundo, como economista, y busca en la expresión artística el sentido de las cosas y de sí mismo. Su formación en las artes es autodidacta: lectura intensa de filosofía, historia del arte, literatura, diarios y autobiografías, junto con cursos sucesivos de cómic, pintura, escultura en piedra, freehand, photoshop, entre otros. Sus trabajos de dibujo e ilustración se pueden encontrar en libros juveniles, material didáctico, diseño de joyas, carteles y revistas.
Le gusta la montaña, el olor de los cuadernos recién estrenados, cocinar guisos caseros y hacer cosquillas a su hijo Bruno y su hija Candela. Nació en Madrid, pero su casa es blanca con las ventanas azules y está en Menorca, junto al mar. Ahora vive en Bruselas.